Cuidado de tu piel con Caladryl

¿Camas de bronceado? Las consideraciones que debes tener antes de usar una

septiembre 27 2021

En las últimas décadas, el uso de camas y cabinas de bronceado ha ido en aumento. Esto, a pesar de que los especialistas alrededor del mundo piden evitar su uso con fines estéticos debido a los daños que causan en la piel. Por eso, queremos compartir contigo algunas consideraciones a tener en cuenta antes de usar una.

Efectos del bronceado artificial en tu piel

Quizá hayas escuchado que las cabinas son más seguras que el bronceado en exteriores, pero múltiples investigaciones lo desmienten. Las camas de bronceado también emiten rayos ultravioleta (UV), los cuales dañan las células de nuestro cuerpo. De hecho, en estos espacios la radiación UVA puede concentrarse hasta cinco veces más que durante un baño de sol.

 

Esta exposición deliberada a los rayos UV, a través de fuentes de bronceado artificial, incrementa la incidencia de los principales tipos de cáncer de piel. Si bien la principal causa de esta enfermedad es la radiación ultravioleta proveniente del sol, el uso de las cabinas podría aumentar la incidencia. 

Otros efectos nocivos del bronceado en interiores son:

  • Puede causar daños en las estructuras internas y externas de los ojos y los párpados.
  • No es una fuente segura de vitamina D, como puede llegar a ser el sol si se toma con precaución. 
  • Las camas de bronceado no te protegen de quemaduras en la piel. 

 

Recuerda que el bronceado es un signo de lesión, no de salud. El cambio de tono en tu cuerpo se genera después de que los rayos UV llegan a la capa interna de la piel, produciendo melanina, un pigmento que da color. En este proceso tus células se ven invadidas y pueden sufrir daños.

Consideraciones antes de tomar un bronceado artificial

Si decides utilizar una cama de bronceado, debes asegurate de no pertenecer a uno de los grupos especialmente sensibles a sus efectos:

 

  • Personas con fototipo de piel I.
  • Mujeres embarazadas.
  • Menores de 18 años.
  • Quienes tienden a tener pecas.
  • Personas con gran número de lunares.
  • Aquellos con un historial de quemaduras solares frecuentes en la infancia.
  • Personas con la piel dañada por el sol.
  • Pacientes con lesiones premalignas o malignas en la piel
  • Personas que estén tomando medicamentos sobre todo aquellos que aumenten la sensibilidad de la piel.

 

Además, lo mejor será evitar prácticas que aumenten el riesgo de daño en tu piel:

 

  • No usar gafas de protección, lo cual puede provocar lesiones oculares temporales y permanentes.
  • No respetar las recomendaciones en cuanto a duración, intensidad de exposición y distancia de la lámpara.
  • No esperar  un mínimo de 48 horas entre cada sesión de bronceado, lo que evita que te percates si tu piel está sufriendo quemadura.
  • Broncearse usando perfumes, maquillaje o cualquier otro cosmético.
  • No hidratarse bien con agua y productos para la piel. 
  • Exponerse al sol al finalizar la sesión.

 

Si notas cualquier tipo de lesión en tu piel, suspende las sesiones de bronceado y consulta a tu médico.

 

También puedes acercarte a aliados como Caladryl Clear®, que ofrece una loción para las quemaduras y lesiones leves en tu piel. Su fórmula te ayudará a aliviar las molestias como dolor, ardor y comezón.

 

Si persisten las molestias, consulte a su médico. 

Fuentes: 

  1. Organización Mundial de la Salud
  2. Revista Costarricense de Salud Pública
  3. Asociación Española contra el Cáncer
  4. Food and Drug Administration
  5. Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades
  6. Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos
  7. American Academy of Ophthalmology