Cuando sientes comezón se activa de forma inmediata el acto-reflejo de usar las uñas para rascarte y aliviar el picor del momento. Sin embargo, esta acción incrementa la sensación de comezón y entonces volvemos a rascarnos, pero está vez más fuerte: esto podría generarnos heridas que pueden sangrar. Seguro ya pasaste por esto, pero aquí te explicamos mejor cómo una simple comezón puede producir afectaciones graves en la piel.
Síntomas de la comezón
La historia comienza de una forma muy inocente…
- Puedes sentir una ligera picazón en zonas pequeñas de la piel, como en el brazo, la pierna o la espalda.
- La picazón en la piel puede ocurrir sin ningún cambio notable en la piel, aunque también puede estar acompañada de: enrojecimiento, bultos, manchas o ampollas, piel seca y agrietada, piel escamosa o curtida.
- Puede ser pasajera o puede durar un periodo prolongado de tiempo y ser intensa.
- Cuanto más te pica, más te rascas y este ciclo de picazón-rascado puede provocar una infección.
El problema es que si no controlas el acto-reflejo de rascarte, puedes lastimar tu piel, en especial si dejas que pase mucho tiempo. La picazón y el rascado prolongados provoca lesiones, infecciones y cicatrices. Pero todo esto lo puedes evitar si controlas rascarte y no tocas tu piel.
Si tienes picazón en tu piel por un largo periodo de tiempo , te sugerimos acudir a tu médico general o con un especialista dermatológico. Siempre es más seguro que un especialista revise qué le pasa a tu piel y que determine cuál es el procedimiento más seguro para no lastimarte. Sin embargo, hay soluciones sencillas que puedes implementar para aliviar el deseo de rascarte de forma descontrolada.
¿Cómo aliviar la picazón?
Cuando sientas los primeros síntomas de picazón en la piel que te obligan a rascarte, puedes aliviarlos de la siguiente forma:
- Con cremas y lociones que no contengan alcohol o fragancia. Aplica dos o tres veces al día, especialmente después del baño, mientras la piel esté húmeda.
- En lugar de usar agua caliente, utiliza agua tibia.
- Lava tu piel suavemente con un jabón suave sin perfume, seca con una toalla suave mediante palmaditas y no frotes.
- Mantén las uñas limpias y cortas.
Para no desgarrar tu piel y que no compliques el padecimiento que está experimentando tu piel, puedes utilizar Caladryl Clear®, que es un auxiliar en el alivio del dolor y el picor de la molesta comezón.
Sin embargo, no olvides que ante cualquier caso grave, lo mejor es consultar a un especialista.
Consulte a su médico.
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